Muchas personas siguen mirando con ciertas reservas a los autos eléctricos, en algunos casos por los mitos que han sobrevivido durante años en el pensamiento popular. Por ello, para aclarar algunos aspectos de esta alternativa a los vehículos de combustión tradicionales, algunos de ellos no tan malos como se piensa y otros no tan buenos, vamos a tratar de desmitificar el vehículo eléctrico.
¿Existe riesgo de electrocución?
Uno de los grandes mitos que han sobrevolado acerca del auto eléctrico, mucho antes incluso de que fueran la realidad que son hoy en día es el miedo a electrocutarse por entrar en contacto con el agua, ya sea por una inundación o por la entrada de ésta en ciertos componentes como los motores, la batería u otros sistemas eléctricos. Expertos aclaran que no hay de que preocuparse, ya que según las diversas pruebas que este equipo ha realizado, sumergiendo ya sea el conjunto y/o los sistemas eléctricos de un automóvil de esta clase, en ningún caso se acaba produciendo una electrocución.
¿Existe más riesgo de incendio a la hora de tener un accidente?
Es posiblemente la principal preocupación
hoy en día en torno a los vehículos con batería, y aquí según el director de
CESVIMAP no hay diferencias respecto a un auto de combustión tradicional, ya
que los vehículos eléctricos deben cumplir con unos rigurosos requisitos de
seguridad tanto en lo relativo a sus baterías como en el diseño estructural.
¿Es más fácil reparar un auto eléctrico?
Al ser su mecánica distinta a la de un auto de combustión si es verdad que ciertas operaciones demandan una mayor cualificación, además de ciertas operaciones para garantizar la seguridad.
¿Reparar un auto eléctrico es menos seguro?
No, los procesos y técnicas de reparación suelen ser similares a los de autos con otras mecánicas, la única diferencia, explica, es que como se ha mencionado ya se necesita una formación mínima del técnico de carrocería, para tener identificados los sistemas eléctricos y evaluar la seguridad de las reparaciones.
¿Sólo habrá autos eléctricos en el 2030?
Por mucho que todo lo anterior haya ayudado a convencer a más de uno la realidad es que el auto eléctrico no va a sustituir al auto de combustión como opción predominante de la noche a la mañana, ni siquiera en diez años. Los automóviles eléctricos están incorporándose lentamente al mercado, pero no será un cambio inmediato.